Pues es lo que tiene el contar con gran poder de convocatoria, que puedes vender millones de pintauñas en un par de semanas y dejar al mercado lleno de adolescentes pidiendo a gritos más y más.
Y bueno, hay que darles lo que quieren, porque quién sabe de qué será capaz una legión de crías con las hormona alborotadas.
Pero lo que nos ocupa aquí no es la rebelión de las crías, sino el hecho de que los pintauñas de Justin Bieber han desaparecido del mercado y no porque los dejaran de fabricar, sino porque simplemente se han agotado, se han vendido todas y cada una de las unidades que se distribuyeron en más de 3 mil puntos de venta (en tierra yanqui).
Al parecer los pintauñas se pusieron a la venta poco antes de navidad y se vendieron como churros. Los empresarios están encantados, por supuesto; las que no están muy contentas son las fanáticas del cantante que se quedaron sin poder hacerse con su pintauñas marca Bieber, aunque ya han bombardeado con llamadas telefónicas amenazantes a los fabricantes, quienes a su vez prometieron abastecer nuevamente el mercado en febrero próximo.
Y había quienes dudaban de la línea de cosméticos del chaval. Así están las cosas hoy en día.
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